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¿Será verdad?

Ap.12 Las selañes del cielo

La mujer (Israel), el dragón (Satanás), el Hijo (el Mesías Jesús ) Conozca a verdad para que nadie lo engañe. El segundo y útimo intento del Querubín caído y sus demonios para tomar por asalto el trono del Hijo de Dios. Su derrota a manos del arcángel Miguel y sus ejercitos. Las consecuencias de su derribo y su confinamiento al planeta tierra.     Israel y el inicio de la segunda parte del período de la tribuación Solicte gratis este libro a ricardoarias349@gmail.com Estamos para servirle, bendiciones del Vencedor del Calvario, Jesús, el Mesías de Israel

la iglesia de pérgamo


 






Carta a Pérgamo

 

Donde habita Satanás

(Período de la Iglesia 315-590)

“Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: “El que tiene la espada aguda de dos filos, dice esto: “Yo sé dónde moras: donde está el trono de Satanás. Guardas fielmente mi nombre y no has negado mi fe, aun en los días de Antipas, mi testigo, mi siervo fiel, que fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. Pero tengo unas pocas cosas contra ti, porque tienes ahí a los que mantienen la doctrina de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, a comer cosas sacrificadas a los ídolos y a cometer actos de inmoralidad. Así tú también tienes algunos que de la misma manera mantienen la doctrina de los nicolaítas. Por tanto, arrepiéntete; si no, vendré a ti pronto y pelearé contra ellos con la espada de mi boca. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor le daré del maná escondido y le daré una piedrecita blanca, y grabado en la piedrecita un nombre nuevo, el cual nadie conoce sino aquel que lo recibe” (Ap.2.12-17)


La ciudad de Pérgamo

 

A

 unos ciento diez kilómetros al norte de Esmirna y a veintidós del mar Egeo se encuentra la ciudad de Pérgamo (griego Πέργαμος), en Turquía y frente a la isla de Lesbos, en la región llamada Eólida. Sus ruinas rodean a la actual ciudad de Bergama, construida sobre los cimientos de lo que fue la parte baja de Pérgamo. Fue fundada por colonos griegos, contemporáneos a la construcción de la ciudad de Troya en la tierra firme de Grecia. La ciudad estaba asentada en una colina a trescientos metros de altitud, rodeada por el grandioso valle del Caico. El llano del área de Pérgamo es dominado por un alto y rocoso promontorio que da la apariencia de permanencia, majestad y solidez. Mientras los valles de Éfeso y de Esmirna son reducidos por las montañas que los rodean, el valle de Pérgamo es muy ancho, alcanzado hasta el mar a veintidós kilómetros de distancia. La impresión inevitable es una de fortaleza, autoridad y de gran tamaño. Las tierras alrededor de la ciudad se encontraban entre las más productivas de la provincia y suministraban a las ferias de Pérgamo todas las verduras deseadas por la población.

Fue la capital de Asía hasta el fin del siglo I. Fue una ciudad grande y próspera a principios del siglo III a.C. Históricamente los días de gloria Pérgamo comenzaron bajo el rey Atalo I (241-197 a.C.) quien combatió junto a los romanos en contra de Filipo V de Macedonia. Eumenes II Sóter (197-159 a.C.) también se alió a los romanos en contra de Antíoco III de Siria. Luego la importancia de Pérgamo declinó bajo los sucesores de Atalo II Filadelfo (159.138 a.C.) y Atalo III (138-133 a.C.). Los logros de Eumenes II en Pérgamo probablemente son las dos más grandes contribuciones a la ciudad. Estableció una biblioteca de más de doscientos mil pergaminos. Esta biblioteca era únicamente superada por la de Alejandría, Egipto, en el número de volúmenes. El mecenazgo cultural se mantuvo como una tradición dinástica hasta el 133 a.C. cuando Atalo III legó su reino al Imperio Romano. Todos los volúmenes de la biblioteca fueron enviados a Alejandría por Marco Antonio como un regalo a Cleopatra de Egipto.

Sir Williams Ramsay, que visitó todas las ciudades de las iglesias del libro de las Revelaciones escribió esto de la ciudad Pérgamo:

“Más que todas las otras ciudades de Asia Menor, le da al viajero la impresión de una ciudad real, sede de autoridad. La colina rocosa sobre la que se levanta es tan gigantesca que domina la amplia planicie. Tan orgullosa e imponente”

 

Su nombre ha quedado perpetuado en el término pergamino (en inglés, parchment; en francés parchemin; en holandés, perkament). Al estudiar la historia de la ciudad de Pérgamo se aprende de inmediato que era un centro cultural famoso. Famosa por su biblioteca, ésta se levantaba en la cumbre de la Acrópolis. Cuando Egipto puso un embargo sobre la exportación del papiro como represalia contra el rey de Pérgamo, Eumenes, por emplear al famoso bibliotecario de Alejandría, llamado Aristófanes. Como respuesta a este embargo ellos decidieron producir su propio papel. De esta manera tomaron la piel de ovejas y cabras, las trataron con sustancias especiales y produjeron el pergamino. En algunas universidades todavía se usan pergaminos para imprimir los títulos que se entrega a los estudiantes que se gradúan.

Este papel especial viene de esta cultura. La biblioteca de Pérgamo era tan grande que tenía un salón de lectura medía15x20 metros, y se decía que tenía más de doscientos mil volúmenes que no eran propiamente volúmenes, sino rollos. La biblioteca tenía agujeros en las paredes en donde introducían los rollos, tuvo que haber sido una biblioteca gigantesca. Así que era un centro cultural. Fue, también, la primera ciudad que erigió un templo al emperador romano (Augusto) en el año 29 d.C., e introdujeron el culto al César, luego erigieron templos a Roma y a los emperadores Trajano y Severo. Se hizo notable por sus monumentos religiosos, entre los que descollaban el templo dedicado a Zeus Soter (nombre griego de Júpiter Salvador), asentado sobre una plataforma excavada en la roca y el dedicado al dios Asclepio, el dios griego de la sanidad (este equivale a Esculapio, el dios romano de la medicina).

 Era el centro de una orden de sacerdotes médicos cuyo emblema era una serpiente, que hoy día se sigue usando como figura de la farmacia, pero para los cristianos era el símbolo de Satanás (Gn.3:1; Ap.12:9). La gente acudía de muchos lugares a esta ciudad en busca de sanidad. Se cuenta que los pacientes mientras dormían dentro del templo esperaban que alguna serpiente (no venenosa) se cruzara sobre el cuerpo del enfermo o se enroscara sobre él, con lo que los dioses revelaban, al parecer, a los sacerdotes y médicos, por medio de visiones y sueños, los remedios que eran necesarios para reestablecer su salud. El método psicosomático fue usado para tratar a los enfermos: un aspecto de la terapia obligaba al paciente andar por un largo túnel. En el techo había agujeros parecidos a respiratorios, pero desde estas aperturas salían voces de mujeres susurrando suavemente: “Tú te vas a sanar, te vas a mejorar, te sientes mejor”.

En la escuela de Esculapio aprendió sus artes curativas el famoso médico de la antigüedad, Claudio Galeno Nicon de Pérgamo, llegó a ser el más célebre después de Hipócrates. Su máxima de que “la naturaleza nada hace en vano”, le indujo a buscar la relación entre la forma de los órganos y su función. Fue médico de los emperadores romanos Marco Aurelio y Cómodo. Murió en el 210 d.C.

Pero la fama de Pérgamo estriba principalmente en su preeminencia religiosa. Debido a que Éfeso, Esmirna y Pérgamo eran ciudades rivales, rivalizaban entre sí para tener la preeminencia. Éfeso era el centro político, Esmirna era el centro comercial y Pérgamo era el centro religioso. La historia menciona a cuatro deidades patrones de la ciudad de Pérgamo: Zeus, Atenas (por la influencia de los griegos) Dionisos y Asclepio (por la más antigua influencia de la región). Los dos anteriores fueron reverenciados como el dios toro y el dios serpiente. El nombre místico de Dionisos era “jagios tauros” (jagios tauros), “toro sagrado”. Una moneda de aquellos tiempos muestra al emperador romano Carcalla, adorando a una serpiente entrelazada en un árbol santo.

El templo principal de la ciudad de Pérgamo cubría casi toda la acrópolis y en el declive debajo de éste se encontraba el gran altar, en forma de trono, dedicado al dios principal del panteón griego, Zeus. Zeus fue llamado “soter theos” (soter theos), “el dios salvador”. Sobre todo, la ciudad se enorgullecía de su culto a los emperadores. Tenía tres templos dedicados a emperador romano. El emperador César Augusto pasó los inviernos en la ciudad de Pérgamo porque Roma era muy fría e incómoda durante esa época del año. Como alcohólico asistía a las clases de la escuela de medicina para los alcohólicos. A cada ciudadano de Pérgamo se le requería que ofreciera incienso al emperador romano una vez al año y declara que “César era el señor”.


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