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ha estudiado a profundidad hasta aquí cuatro sellos y conforme se abre cada
sello se descubre que cada uno está conectado con un ser viviente y conectado
con un caballo. Por eso se los llama los cuatro jinetes del Apocalipsis. Los
últimos tres sellos presentan, incluso, un cuadro más ominoso que los primeros
cuatro. Mientras que los primero cuatro tiene que ver con el gobierno humano
que está detrás de la persecución, los últimos tres sellos tienen que ver con
la intervención Divina. Ahora es Dios quien afecta directamente lo que va a
suceder en las vidas de las personas en el período de la tribulación en esta
tierra. Hay otra diferencia en el quinto sello que se debe mencionar antes de
que se analice el pasaje bíblico en sí, y es que el quinto sello no presenta
ninguna acción como tal. No hay ningún caballo que cruce el escenario, no hay
ninguna acción que presenciar. El quinto sello, como se ve, es simplemente la
respuesta a una acción. Cuando se lee lo que sucede cuando se abre el quinto
sello se puede observar los resultados de la persecución, no la persecución en
sí misma. Para cuando se lee esto en el quinto sello los mártires ya están
muertos. Sus almas están bajo el altar. La persecución, en lo que toca a esas
personas, ya se ha acabado.
El capítulo siete del libro de
las Revelaciones introduce al lector al hecho de que al comienzo de la
tribulación habrá una gran cosecha de almas en todo el planeta tierra. Este
avivamiento mundial sin precedentes en la historia de la humanidad será posible
gracias a la prédica de los dos testigos de Jerusalén, que, durante la primera
parte del período de tribulación, estarán denunciando las artimañas del
Anticristo y el Falso Profeta (Ap.11:3-13). Estos dos testigos son otra
ilustración en este libro profético que muestra que Dios está tan interesado
por las almas que envía dos mensajeros sobrenaturales para convencer a la
humanidad. Gracias a sus ardientes prédicas ciento cuarenta y cuatro mil judíos
(doce mil de cada una de las doce tribus de Israel) aceptan al Mesías Jesús
como su Señor y Salvador personal. Ellos saldrán por todo el mundo y producirán
este avivamiento mundial y gracias a ello se convertirán a Cristo más almas que
durante todo el período de la Gracia.
Ahora, con la apertura del quinto
sello, el escenario celeste cambia repentinamente. Se alienta al lector a
recordar que el profeta Juan estás viendo en visión cosas que todavía no han
ocurrido aquí en el tiempo. La sala del trono de Dios ahora se convierte en el
tabernáculo celestial que se describió en detalle en el capítulo cuatro y que
incluye el majestuoso trono con el arco iris alrededor, con la Deidad presente
en la forma de Dios el Padre sentado en el trono. El capítulo el Señor Jesús
deja de mostrarse como un Cordero recién sacrificado con siete cuernos y ojos y
se convierte en el León de la tribu de Judá. El Espíritu Santo está presente en
forma de siete lámparas encendidas delante del trono. También están presentes
los cuatro seres vivientes cuya función es anunciar los juicios inminentes y
dirigir la alabanza; los veinticuatro ancianos con coronas de oro, y también
una vasta multitud presente para presenciar los eventos a medida que salen del
trono.
Se le recuerda al lector que
también se describió el mar de vidrio como parte del tabernáculo celestial. Los
atrios en los templos terrenales son representativos del mar de vidrio en el
entorno celestial. En ambos escenarios, el propósito de estos actos es que la
gente venga y sacrifique oraciones y holocaustos, tendiendo el templo un altar
de bronce para el sacrificio y de la misma manera el tabernáculo celestial
teniendo su propio altar, como se ve ahora en Ap.6:9 donde el profeta Juan se
refiere al altar en conexión con la apertura del quinto sello del libro sellado
con siete sellos.
La apertura de este quinto sello enseña de
forma clara que, después que esto comience, vendrá un tiempo de gran
persecución personal para los hijos de Dios, donde la mayoría serán asesinados
por el gobierno mundial del Anticristo. Estos son los santos de la tribulación
como a personas que no recibieron a Cristo al momento del arrebatamiento de la
Iglesia, antes que comenzara el período de tribulación, pero con los recibieron
como resultado del testimonio fiel de qué se va a describir en el capítulo siete.
El profeta Juan, según el pasaje, mira al altar y debajo del altar ve las almas
de los que ya han muerto como mártires. Se nos deja a nuestra imaginación el
método por el cual fueron masacrados y el sufrimiento que deben haber
soportado, pero no se nos dice nada de cómo sucedió. Pienso que para que se
pueda comprender estos versículos hay cuatro puntos de los que debemos hablar. Es
sumamente importante que visualice el contexto del martirio ¿Por qué los
mataron y en qué escenario los mataron?
·
¿Quiénes
son estos mártires cuyas almas se lee en el texto están debajo del altar?
·
¿Cómo
perdieron sus y vidas?
·
¿De
dónde vinieron?
También
hay que recordar lo que es la piedra angular sobre la cuestión si la Iglesia
entra al periodo de la tribulación o no
· La
Iglesia del Señor Jesucristo ya ha sido arrebatada a los cielos, a la casa del
Padre (Jn.14):
·
La
profecía bíblica habla acerca del rapto, el Señor no sólo llevará consigo a
todos los santos que estén vivos de la Era de la Gracia, sino que los muertos
en Cristo resucitarán primero, y los que estemos vivos serán arrebatados para
ir a estar con ellos (1Co.15:51-52). Después del rapto de la Iglesia comienza
el período de la tribulación.
Ap.6:9-11
revela lo que está sucediendo durante la apertura de los primeros cuatro sellos
a pesar del pacto de protección que el Anticristo habrá hecho con Israel
(Mt.24:9), se desatará un severo antisemitismo un principio usado en este libro
para explicar los eventos es un regreso recapitulación del material abarcado
agregando una explicación de los eventos.
6:9
Cuando el Cordero abrió el quinto sello:
Romperse
el quinto sello como gu dos no se oye la orden de salir como y las fuerzas
celestes parecen quedar inactivas, en razón de que el mandato de perseguir y
degollar a los siervos de Dios no proviene del trono de Dios, sino de Satanás,
aunque resulte cierto que, sin el permiso de Dios, ello no podría ser llevado a
cabo. Cuando el Cordero rompe este quinto sello claramente se ha comenzado la
segunda mitad de la semana setenta del profeta Daniel, la gran tribulación.
Mientras el mundo sufre, el Anticristo prosperará. A medida que proyecta su
asombroso poder militar alrededor del mundo, también extenderá su autoridad
política e influencia religiosa en cuatro formas identificables
·
Alabanza
pública Discursos
públicos cautivadores
·
Su
culto religioso
·
El
engaño a la nación de Israel
Después de la conquista
inicial del Anticristo sobre las tres naciones más poderosas de su federación,
y ahora, nuevamente, después de su exitosa agresión a otras naciones fuera de
ella, el mundo comenzará a cantar sus alabanzas. Si bien esta alabanza pública
continuará | 
